Medias: cómo y de qué color llevarlas o no llevarlas esta temporada

Si estás puesta en moda, ya sabrás que las prescriptoras de estilo han decidido prescindir de las medias ya llueva, truene o nieve. A pesar de su inutilidad a efectos prácticos, ya que no quita el frío pero te asfixias con ellas si hace calor, hay que reconocerle una labor estética importante: no es lo mismo unas piernas ‘con’ que ‘sin’. Si no estás dispuesta a sufrir su ausencia, no te conformes con lo de siempre.

Ojo al color: mejor coordinar que contrastar

Eso de que la media debe contrastar con el color de tu ropa ha pasado a la historia. La mezcla cromática de Lucy Liu no es bienvenida este otoño/invierno. Si la tendencia va hacia que las medias destaquen lo menos posible, una solución puede ser llevarlas coordinadas con el color de tus prendas. Puedes apostar por usar las de menor gramaje, como las negras de Paula Patton, o elegir unas opacas en el tono de predominante de tu estilismo, siguiendo la propuesta de Mary Katranzou en la pasarela de Londres.

Medias color piel, ¿horror o acierto?

Si no te atreves a salir a la calle sin medias pero te gusta el efecto ‘nude’, procura elegir unas que mejoren el aspecto de tus piernas . ¡Pero di no al blanco definitivamente!. Sigue el ejemplo de Giovanna Battaglia y busca siempre un tono más oscuro que el de tu piel, de este modo te podrás aprovechar del efecto estilizador del bronceado. Si elijes no llevar pantis, el caso de Miranda Kerr, no olvides que para lucir piernas en otoño deben estar tan impecables como en verano.

Medias de rejilla

Las rejillas vienen fuerte.

También desde París viene una propuesta de Saint Laurent interesante, que pasa por la vuelta al ‘grunge’ con medias de rejilla rotas de gramaje muy bajo y tejidas en ángulo recto.

Te atreverías con ellas?.

No todo vale en las de dibujos

Si este año aún así quieres llevar las piernas decoradas, olvídate de las románticas flores de Katy Perry, nunca sentaron demasiado bien. Los ‘prints’ se resisten a desaparecer y sacan codos entre las famosas . Algunos ejemplos interesantes son: Blake Lively con minúsculas estrellas sobre un tul finísimo firmadas por Monique Lhuiller, las de encaje que han vuelto con fuerza son el estilo tatuaje,  y los lunares opacos.

Las rayas: no es lo mismo una cosa que otra

En muy pocas ocasiones a una mujer que han superado la veintena le favorece vestir como una colegiala. Por no hablar de que el efecto poco estilizado que provoca en las piernas unas medias de rayas horizontales. Si te gustan las rayas, elige algo más sutil que pueda incluso disimular pequeñas imperfecciones, como las líneas gruesas que camuflan gemelos, rodilla y muslo, o las verticales.

Los ‘leggins’, enemigos íntimos

A la fiebre del ‘leggin’ que regresó el pasado invierno le ha seguido una verdadera obsesión. Si tuviste la valentía de llevarlos tipo ‘fouseau’ como Sarah Jessica Parker, este año mejor déjalos de lado. Pásate al lado ‘punk que se propone en pasarela. Los rasgados y de piel pueden ser una clave. También puedes explorar el fenómeno superposiciones que propone Candela Novembre, quien apuesta por los ‘leggins’ vaqueros bajo todo tipo de prendas, incluida la alta costura de Chanel.