¿Qué es lo que vuestra pareja sacaría de vuestro armario y quemaría ipso facto?

He abierto el armario a mi pareja y estas son las 9 prendas que le gustaría quemar

«¿Cómo no te puede gustar? ¡Si es tendencia!» y alguna que otra frase similar ha servido para aplacar a padres, amigos y novios alguna vez. La moda no siempre es bien recibida por todos y ciertas prendas y calzado no obtiene una aprobación general. ¿Qué es lo que vuestra pareja sacaría de vuestro armario y quemaríaipso facto? He aquí las 9 prendas que muchos hombres odian (y odian mucho)

1. Los mom jeans, el eterno debate

Nos vemos genial con ellos y se han convertido en un must have de toda fashionista que se precie. Son holgados, no aprietan, quedan perfectos con un par de stilettos y te dan un aire de lo más working girl, pero seamos sinceras, los mom jeans son una de las prendas más odiadas por los hombres. «Te quedan demasiado grandes» es su frase más socorrida, aunque nosotras preferimos hacer oídos sordos y continuar observando fotografías de street style para crear diferentes looks con ellos.

2. ¿Pantalones palazzo? No gracias, demasiado anchos

A medio camino entre pantalón de estilo hippie años 60 y los pantalones de pata de elefante que se pusieron de moda al son de la música disco de los 70, los pantalonespalazzo son otra de las prendas que más discordia generan.

¿La frase disuasoria más utilizada? «No te lo compres, parece una falda» pero claro, no entienden que con un bonito crop top esa «falda» queda de lo más chic…

3. Odio infinito a las faldas midi

«La señorita Rottenmeier a tu lado vestía más moderna», vale, es cierto, las faldas midiplisadas son de todo menos juveniles, aunque si las combinamos con las prendas correctas el look final puede ser de 10.

¿Qué tal si incluimos una biker de cuero y un bonito crop top lencero? Quizá su opinión cambie, o quizá no, pero por intentarlo que no quede.

4. Veto eterno a los pantalones culotte

«Sencillamente, no hay por dónde cogerlos, son lo que se llamaban piratas hace unos años, pero más anchos» han sido las palabras que han salido de su boca. No entiende elgusto por lo oversize y afirma que «parece que vayáis con falda, como con los palazzo«. Razón no le falta por otra parte, pero ¿y lo cómodos y estilosos que son los culottes?

5. Las cazadoras vaqueras oversize (y casi toda prenda XXL)

Rescatando el estilo 90’s las cazadoras vaqueras (a poder ser con parches) llegaron hace un par de temporadas con idea de quedarse. Dicho y hecho, a día de hoy no hay fashionista que se precie que no tenga un ejemplar (o dos) en su poder.

No obstante, esta prenda que bien podíamos haber rescatado del baúl de los recuerdos, no tiene tantos simpatizantes como creíamos y hay muchas personas que no les dan su ok.

6. Mejor ni hablar de los petos…

Los overall nos conquistaron a golpe de look de celebrity y blogger. Nos encandilaron en versión larga y en tela vaquera: fáciles de combinar, sencillos de lucir.

Pero ¿Qué ocurre si complicamos más el asunto y añadimos estampado y tendenciaculotte al peto? Que nos queda un look como a Chiara Ferragni, que para algunos hombres bien podría formar parte de la horda de looks de Leandra Medine del blog Man Repeller.

7. Los vestidos lenceros, otro big no

Comparto un poco la opinión con mi pareja en este punto, los vestidos lenceros si se combinan bien pueden ser un 10 rotundo, si no es así, el error es catastrófico y garrafal.

El mix de vestido lencero y biker de cuero es ok, incluir debajo una camiseta básica, no, o eso al menos afirma mi pareja, porque sinceramente ¿no queda mal la camiseta blanca, verdad?

8. Los mocasines ¡Los carga el diablo!

Los recuerdos del colegio y de su fatídico uniforme nos acechan al ver mocasines como calzado it, pero una vez superado el trance, el resultado no está nada mal.

Aunque para trance el de mi pareja cuando le mostré los mocasines-yeti de Gucci. Esa noche no durmió, tuvo pesadillas con ellos.

9. ¿Flatforms? ¿En serio? ¡Venga ya!

A medio camino entre disco Stu de los Simpsons y una versión renovada de nuestro «yo» adolescente en plenos años 90, las flatforms o las detestas o te enamoran. Ojito con ellas, algunas incluso pueden acabar con tus pies.

No obstante, mi pareja lo tiene claro «donde estén las típicas sandalias…»

Interesante información de los gustos de nuestros chicos.